Siempre he sido muy reacia a cualquier tipo de pinchazo, pero llegó un momento, con 49 años, que sentí la necesidad de mejorar el aspecto de mi cara, sobre todo en cuestión de flacidez.Me puse Ellansé y noté una mejoría brutal. La llamada “línea de marioneta” (no sé si es así, exactamente), había desaparecido, dándome un aspecto rejuvenecido y con menos flacidez en ambos lados de la cara. Con el paso de los días noté una mejoría aun mayor. Junto con el Botox, creo que son dos tratamientos imprescindibles en piel madura.